Supervigilancia

Queremos un sector mucho más robusto, más fortalecido: Supervigilancia

Carlos Alfonso Mayorga Prieto, está al frente de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad privada desde mayo de 2015, después un riguroso proceso de selección por méritos que el Ministerio de Defensa adelanto a lo largo de cuatro meses y evaluado por una importante firma internacional de caza talentos.

Su perfil académico habla por sí solo: Abogado de la Universidad de la Sabana, con Maestría en Ciencia Política de la Universidad Javeriana, Especialista en Derecho Constitucional y Parlamentario de la Universidad Externado de Colombia; experto en gestión y promoción de organizaciones no gubernamentales de la Universidad Complutense (Madrid España), Master en Acción Política y Participación Ciudadana en el Estado de Derecho de la Universidad Francisco de Vitoria (Madrid España), y Magister en Seguridad y Defensa Nacionales de la Escuela Superior de Guerra.

Con una experiencia profesional mayor a 20 años en el sector público, se ha desempeñado como diputado, gobernador encargado, Secretario de Desarrollo Económico, Secretario de Gestión Empresarial, Secretario de Minas y Energía en el Departamento de Boyacá. Ha sido Contralor Delegado Intersectorial de la Unidad de Investigaciones Especiales Contra la Corrupción y Asesor de Asuntos Ambientales de la Contraloría General de la República. En organismos internacionales ha sido Consultor de la Iniciativa para el fortalecimiento de la Capacidad Competitiva- IFCC– OEA y Asesor de la Organización de Naciones Unidas (convenio COL-009). Igualmente ha desempeñado cargos como asesor del sector privado y docente universitario.

Máxima Seguridad le entrevistó acerca de su visión del sector, los retos de la Superintendencia y la lucha contra la ilegalidad.

MS: ¿Cuál es su balance de inicio al recibir el cargo de Superintendente?

CM: Inicié con algunas inquietudes por el proceso de interinidad que tuvo la institución por cerca de 10 meses, el cual generó atrasos y dificultades propias de la gestión pública. El objetivo es “desatrasar” la entidad, dejarla al día en los más de mil trámites que están pendientes y ya se están evacuando, gracias al plan de contingencia que estamos manejando.

MS: ¿Cuál es la proyección que tiene para la Superintendencia?

CM: Principalmente, se debe hacer un ajuste a los procesos de la entidad, garantizando los principios de economía, celeridad y eficiencia, en aras de tener respuestas más oportunas y con mayor eficacia.

Estamos trabajando en la definición del plan estratégico para fortalecer los objetivos. El proceso más relevante es renovar y garantizar mejores sistemas de información e interconexión de éstos, tanto para operación como para el control. A futuro visibilizamos una entidad con mayor capacidad de respuesta en corto tiempo, con unos trámites oportunos y una atención eficiente.

MS: ¿Cuáles han sido las dificultades que ha encontrado?

CM: Básicamente el envejecimiento de los sistemas de información, se requieren ajustes. Aspiramos a inaugurar una sede electrónica en enero 2016, para que muchos de los trámites se realicen a través de la página web. Por ejemplo, radicación virtual, diligenciamiento de formularios, constancias en código de barras, respuestas electrónicas a trámites y capacidad para subir documentos.

MS: ¿Cuál será la estrategia para fortalecer el sector?

CM: Tenemos identificados unos aliados estratégicos, la administración pública es en esencia una actividad colectiva y solidaria por naturaleza, que requiere cohesión y sinergias. Acabamos de firmar con la Fiscalía General de la Nación un convenio para hacer más eficiente la lucha contra la ilegalidad, haciendo los requerimientos en materia de policía judicial, redes de apoyo, cooperación y salvaguarda de la cadena de custodia. Lo anterior con el propósito de generar una herramienta eficaz en la seguridad ciudadana.

Próximamente se firmará un convenio con la Cámara de Comercio para la creación y el fortalecimiento del Observatorio de Criminalística, el cual permitirá georreferenciar los servicios de la Superintendencia frente a los cuadrantes, identificar tipologías y zonificar los delitos, medir tiempos de respuesta, para que la seguridad privada brinde el soporte al Estado sobre seguridad pública.

Finalmente, estamos en la búsqueda de un aliado internacional para traer otros estándares al país.

MS: En su nuevo cargo ya se ha reunido con los gremios del sector, ¿cómo percibe a estas asociaciones y en qué consistirá su trabajo con ellos?

CM: Con relación a los gremios los veo muy proactivos, conocen el rol que cumple la institución: licenciamos todos los servicios a través de los permisos de Estado y se aplica el régimen sancionatorio sobre el tema.

Con los gremios se quisiera avanzar en el cumplimiento de estándares internacionales de buenas prácticas. En el Pacto Global de Naciones Unidas. Potencializar la satisfacción del servicio, fundamentalmente para mejorar las condiciones de vida de los guardas y de las personas dedicadas a la actividad.

Igualmente, solicitamos a los gremios evidenciar las deficiencias estructurales del sector y mirar cómo corregirlas. El sector tiene todas las posibilidades de crecer. Los gremios han propuesto unos escenarios de discusión interesantes, como participar en labores de desminado humanitario con la experiencia que han tenido estas empresas en otras partes del mundo; otros han querido que avancemos hacia la seguridad penitenciaria y otros, en la seguridad de los espectáculos públicos.

MS: ¿Cuál es la posición de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada de cara al proyecto de ley sobre las reformas que se están planteando?

CM: Se ha estudiado el proyecto que busca reformar el estatuto de vigilancia y seguridad privada, el cual persigue traer a tiempo presente la normatividad y condensarla en un solo instrumento jurídico. Además de visibilizar las debilidades que buscan ser mejoradas. Al respecto tenemos algunas observaciones como: la actualización y fortalecimiento del régimen sancionatorio y la organización de algunos servicios.

MS: Y, ¿la política pública de Seguridad Privada?

CM: A nosotros como Superintendencia nos corresponde definir y asesorar al Gobierno en la Política Pública de Seguridad Privada. Ya tenemos un documento de consulta en la página web sobre lo que va a ser esta iniciativa en Colombia para los próximos años. Lo que queremos es un sector mucho más robusto, más fortalecido, con mayores escenarios que cual pueda desarrollarse y fortalecerse aún más.

MS: Uno de los temas con mayor complejidad e incomodidad de las empresas está en el proceso que viene adelantando Colombia Compra Eficiente y los Exámenes Psicofísicos para el personal operativo. ¿Cómo puede la Superintendencia ser ente conciliador?

CM: Tuve la oportunidad de reunirme con la Dra. Margarita Zuleta, Directora de Colombia Compra Eficiente y dejar un documento por escrito sobre lo que consideramos que deben ser puntos a tener en cuenta, en el acuerdo marco de precios uniformes que están en la licitación. Le he expresado la situación sobre las particularidades de este negocio. Estamos frente a un acuerdo marco que está proponiendo el Gobierno para los servicios de vigilancia y seguridad privada, que serán obligatorios para los servicios que contrate el nivel central de la administración pública nacional. Hicimos varias observaciones, no con el fin de oponernos sino de facilitar el conocimiento del negocio.

Una tarifa regulada, ya que el porcentaje no da un margen de maniobra.
Colombia Compra Eficiente está mirando en una perspectiva general la prestación del servicio por regiones, eso puede generar dificultades por la concentración de unos pocos oferentes o donde no hay mercado.
Escenarios de responsabilidad de los consorcios.
MS: ¿Cómo se percibe la entrada al país de inversores extranjeros?

CM: Depende mucho de lo que defina el Gobierno. Sin embargo se necesita una reciprocidad de escenarios. El país que quiera llegar a Colombia tiene un reto muy grande porque nuestro sector es una potencia muy fuerte. Nuestro escenario de control ha sido modelo para otros países. Si la inversión llega debe ser en escenarios recíprocos, nuestras empresas están en capacidad para responder en otros países.

MS: Y, ¿en Europa?

CM: La seguridad privada aún está en construcción en todo el mundo. En España la seguridad privada ganó una pelea muy fuerte porque logró llegar a los servicios penitenciarios. La Unión Europea está abriendo la oportunidad para ser guardas no solo a los europeos, también a los inmigrantes.

MS: Finalmente, el motor de este sector son los guardas, ¿qué tiene previsto la Superintendencia para ellos?

CM: Con relación a los guardas, como ente regulador y de control, la tarea es garantizarle a estas personas los derechos básicos para que puedan cumplir su función. Con la UGPP tenemos un convenio que estamos instrumentando con el fin de advertir que empresas han incumplido en el tema de aportes parafiscales de ley y así poder sancionar. Se deben garantizar no solo salarios mínimos, seguridad social, bienestar, salud y recreación. Al margen de esa consideración, que las compañías vigiladas por la Superintendencia avancen en estándares internacionales, porque van a ir más allá de los mínimos lo que permitirá mayores beneficios a los vigilantes. También, estamos trabajando con el SENA en capacitación, formación y competencias laborales. Nuestro compromiso no sólo está con el guarda, sino con los medios, los animales que deben estar en óptimas condiciones.

Fuente: Maximaseguridad