¿Cómo mejorar la seguridad escolar en los centros educativos?
Seguridad escolar: ¿Cuántas veces no hemos escuchado que la educación es lo único que nos va a quedar y que es lo más importante de la vida, junto con la familia? Pues, los colegios, universidades, jardines y cualquier entidad educativa no solo son recintos a los que acuden niños, niñas y jóvenes; son la clave del futuro de la sociedad, porque una sociedad educada es garantía de progreso, de respeto y de igualdad.
Por estas razones y muchas otras, es muy importante conocer los riesgos a los que puede estar expuesta cualquier tipo de institución educativa, como también los profesores, estudiantes, funcionarios y visitantes.
Para nadie es un secreto que los colegios e instituciones educativas suelen ser víctimas de robos y actos delincuenciales, que en la mayoría de los casos son llevados a cabo por personas ajenas a la comunidad escolar.
Estos actos, en gran medida se centran en el robo de equipos tecnológicos (Computadores, impresoras, proyectores etc.) y efectos personales de los profesores, estudiantes y administrativos. Además, pueden sufrir el destrozo de sus instalaciones por actos de vandalismo.
Pero el robo no es el único problema que tienen las instituciones educativas. En los últimos años el expendió de sustancias alucinógenas, en muchas ocasiones ha logrado vulnerar la seguridad escolar, con las consecuencias que eso implica en cuanto a incremento de la drogadicción, delitos asociados y por supuesto el impacto en las familias de los jóvenes afectados.
En otro nivel de semejante gravedad, se encuentran las vulnerabilidades que los sistemas de seguridad escolar establecidos por las instituciones tengan para enfrentar delitos de tipo sexual.
De acuerdo al informe de Medicina Legal, entre enero y noviembre del 2018 se reportaron 21.515 denuncias de abuso sexual, que se tradujeron en 64 niños y jóvenes entre los 0 y 17 años abusados cada día, uno cada 22 minutos. De estos casos reportados, 733 ocurrieron en instituciones educativas. En total 9.896 menores de entre 10 y 14 años fueron los que más sufrieron este flagelo, 6.015 de entre los 5 y los 9 años y 2.835 entre los 15 y los 17.
Por eso, la importancia de que cada jardín, colegio privado o público cuente con las herramientas adecuadas para la protección de los estudiantes y funcionarios que acuden a las instalaciones y así proporcionar un ambiente sano todos los niños, niñas y adolescentes.
Rejas, vallas y celaduría no son suficientes
Por sus grandes dimensiones y el acceso de múltiples personas a eventos escolares, los colegios terminan siendo un blanco perfecto para los delincuentes que se las ingenian para violar la seguridad escolar.
Pese a que todos los colegios cuentan con rejas y/o algun tipo de cerramiento perimetral, siempre es posible mejorar los niveles de prevención que eviten cualquier circunstancia delictiva al interior de la institución. Por eso es recomendable, para mejorar la seguridad escolar, la instalación de sistemas electrónicos de alarma y cámaras de seguridad.
En algunas ocasiones se pueden instalar Controles de acceso como torniquetes o puertas con el fin de permitir o restringir la entrada de una o varias personas a un área específica.
Obligaciones de los establecimientos educativos
Toda institución educativa tiene la obligación, según la jurisprudencia colombiana de proteger la integridad física, emocional y moral de los estudiantes que se hallan matriculados o en condición de asistentes en ella.
La ley es clara en establecer que es necesario disponer de profesionales idóneos para la atención y formación de los estudiantes; tomar decisiones siempre teniendo como referencia el cuidado y la protección de los menores de edad y de los adolescentes; establecer procedimientos, procesos y acciones, en sus actuaciones ordinarias y extraordinarias, siempre conducentes a garantizar su integridad física, emocional y moral; y velar por el ejercicio idóneo, profesional y cuidadoso de todas las acciones y actividades formativas, que se emprendan en la institución, para que bajo ninguna circunstancia, pongan en riesgo la integridad de los estudiantes.
La importancia de este tema no solo concierne a los colegios privados, pues en Bogotá la Alcaldía Mayor ha hecho una inversión de más de 97 mil millones de pesos para garantizar la seguridad escolar en las 845 sedes educativas y administrativas de la Secretaría de Educación del Distrito.
Esto hace parte del Programa Integral de Mejoramiento de los Entornos Escolares que la Alcaldía esta llevando a cabo para garantizar la seguridad y el desarrollo integral de las niñas, niños y adolescentes de la capital.
La seguridad escolar es una responsabilidad de todos los colegios y no hay nada más importante que el bienestar de los estudiantes y demás personas que trabajan en algún centro educativo, por eso no escatime en gastos e invierta en un buen sistema de seguridad para evitar incidentes.
Fuente: Seguridad Superior