Burundanga, mitos y verdades de esta terrible Droga
La escopolamina deja a las personas en un estado de vulnerabilidad y provoca amnesia. En redes sociales mujeres denuncian ser drogadas en taxis y remises. ¿Qué hay de verdad en todo esto?
M. asegura que un taxista intentó drogarla en un viaje en el que el conductor roció con un atomizador dentro del vehículo. Ella dice que a los segundos se le cerró la garganta, se le adormecieron las manos y perdió control del cuerpo. Sintió miedo, se puso nerviosa y su reacción fue pedir al taxista que se detuviera, pagar y abandonar el auto. Para ella la drogaron con “burundanga”.A. iba en un remís con su pareja y su hija, que se bajaron antes y ella siguió viaje. A las pocas cuadras creyó dormirse, un desmayo momentáneo. En el auto sintió un olor “raro”, y notó que sus brazos se adormecieron, que le faltaba el aire. Mandó por whatsapp su ubicación a su pareja y decidió salir del remís, bajarse en una estación de servicio. A los minutos los síntomas se fueron y empezó a sentirse mejor. Para ella la drogaron con “burundanga.
G. se despertó tarde y tuvo que pedir un remís para llegar a horario al trabajo. Por las dudas llamó a su compañera de trabajo y le contó en qué auto iba y quién manejaba. A las pocas cuadras, el conductor roció en el interior con una perfumina y subió su ventanilla. Ella se sintió incómoda y pidió bajarse en la esquina de una estación de servicios. Recuerda que no sentía las piernas, estaba mareada, con la boca reseca y llorando. Su compañera la tuvo que pasar a buscar. Para ella, el remisero la había drogado con “burundanga”.
Estas tres mujeres dieron a conocer los casos por redes sociales, que ocurrieron durante enero. Los relatos son similares, también los síntomas y las sospechas del uso de burundanga, la “droga de la violación”, que tanta presencia tiene en el inconsciente colectivo.
En cada relato, las mujeres destacan que “reaccionaron a tiempo”, que afortunadamente pudieron descender del auto. Si bien en ninguno de los casos el hombre que conducía el taxi o remís demostró intención de abusar de ellas, la situación, el contexto, les hizo entender que ese podía ser uno de los desenlaces si permanecían en el vehículo con los síntomas que sufrían, por haber sido drogadas, “tal vez con burundanga”.
Tanto que se habla de la “droga de la violación”, pero ¿qué es la burundanga? ¿Cuáles son sus efectos? ¿Es usada en Mar del Plata por hombres para violar con mayor facilidad a mujeres?
Explicación científica
La burundanga -nombre de origen afrocubano que significa brebaje o bebedizo- es el químico escopolamina, que se sustrae de la planta brugmancia -floripondio-.
El médico doctor Toxicología de la UBA, jefe de Toxicología del Hospital Fernández de CABA y director de FundarTox, Carlos Damin, fue consultado por LA CAPITAL para aclarar cuánto hay de mito y cuánto de verdad en los casos en que se cree que se utilizó burundanga.
“La burundanga es basicamente alucinógena, que muchos utilizan en forma de té de manera recreativa, a partir de la flor de la brugmansia conocida como el floripondio”, explica Damin y agrega: “El té de esta flor tiene un efecto alucinógeno muy parecido al ácido lisérgico, dependiendo como se utiliza hasta puede provocar la muerte”.
El especialista en toxicología, explica que este té, en su uso “recreativo”, produce “un cuadro de desorientación, ensoñación y alucinación”.
– Además del uso “recreativo” ¿La burundanga se utiliza en delitos, como pueden ser violaciones?
– Sí, hay gente que utiliza la burundanga para cometer otro tipo de delitos. En Buenos Aires lo vimos mucho en las “viudas negras”. Esas mujeres que conquistan a un caballero, lo llevan a tomar algo, le ponen en la bebida un poco de escopolamina, lo llevan a su casa y asaltan.
– ¿Qué efecto produce la burundanga para que esto se pueda llevar a cabo?
– Produce un cuadro de desorientación, esa desorientación causa una amnesia, entonces cuando la persona vuelve en sí no se acuerda cómo llegó a esa situación. Esa es una característica de la escopolamina, la amnesia. La persona no sabe con quién estaba. Además, produce una invalidación de la persona que le impide defenderse. Eso sumado a un cuadro clínico de aumento de la frecuencua cardíaca, aumento de la sequedad de la mucosa, delirio y desorientación, facilita la posibilidad de cometer delitos.
– ¿Cómo se contagia?
– Únicamente por ingesta o tal vez podría ser por gotas en el ojo, pero ese caso no sería un uso para cometer delito. Además tiene un tiempo de retardo, no tarda menos de 40 minutos en hacer efecto y ese efecto dura no menos de 6 horas.
– ¿Se puede detectar la burundanga en un análisis de sangre?
– Es muy difícil determinarlo. Tiene que ser una búsqueda muy específica y el método de búsqueda es muy caro, hay que buscar exclusivamente escopolamina en sangre.
Carlos Damin explica y remarca que la burundanga se contagia por ingesta, principalmente mezclándola en bebidas, por lo que “esa idea de la gente, que enseguida que tocó algo mojado y se marea no tiene que ver con una una droga, sino con una fantasía personal”.
– Pero ¿cómo explica entonces esos síntomas?
– Básicamente lo que suele ser es que a través del miedo se genera un ataque de pánico y entonces se le pone nombre a ese ataque de pánico con un ataque químico que no es tal. Por eso, normalmente luego de media hora se sienten bien y eso no es la escopolamina.
– Sin embargo, existen casos de uso de burundanga en delitos graves…
– Sí, casos existen, aunque son más bien situaciones de sospecha con indicios, principalmente en casos de “viudas negras”, que es típico uso de la burundanga.
– La pregunta clave es: ¿Hay alguna sustancia que pueda provocar efectos como los que describen las víctimas arriba de un taxi, un remís o con un roce por la calle?
-Y la respuesta es no. No se conoce ninguna sustancia que pueda causar los síntomas mencionados por esas personas. Es imposible que suceda de un contacto tan corto como agarrar de la mano, tocar un télefono o que el roce en un hombro.
. Qué sucede tras la judicialización
La Fiscalía N°4, a cargo de Andrea Gómez, investiga una episodio de enero, en el que una mujer denunció a un remisero de haber rociado en el interior del auto con un perfume, que le hizo sentir una indisposición repentina.
“Dice que la drogó, la adormeció y la dejó en un estado de vulnerabilidad, y que sospechó que el hombre pretendía violarla”, indicó una fuente.
La mujer radicó la denuncia en la Comisaría de la Mujer, desde donde le brindaron asesoramiento y asistencia con un equipo interdisciplinario.
Además, el remisero se presentó voluntariamente ante la Justicia y ofreció que le peritaran el auto. El hecho quedó caratulado como “averiguación de ilícito” y continúa siendo investigado.
La desaparecida Fiscalía N°8, por ese entonces a cargo de María Isabel Sánchez, en diciembre de 2016 archivó una denuncia por falta de pruebas, en la que una mujer aseguraba haber sido drogada.
En esta oportunidad, la víctima había contactado a un hombre por Facebook para comprarle una prenda de ropa. Habían acordado encontrarse en el centro y, cuando el sujeto le dio una bolsa con la ropa, la mujer comenzó a sentirse mal, se mareó, le temblaron las piernas y huyó para refugiarse en una zapatería. Desde el comercio llamaron a la policía y la mujer recibió asistencia.
Desde la Fiscalía N°8 iniciaron la investigación, realizaron pericias toxicológicas a la mujer y la ropa y, al no encontrar rastros de ningún tipo de droga, decidieron archivar el expediente.
Otra denuncia que llegó al Ministerio Público Fiscal fue la de una mujer que aseguró que en el interior de un boliche de San Martín al 3400, mientras festejaba con un grupo de amigas una despedida de soltera, le pusieron algo en la bebida y la drogaron para abusar sexualmente de ella.
La mujer se había despertado esa noche en la casa de un hombre, sin recordar cómo había llegado allí ni lo que había sucedido. A pesar de los indicios y de lo sucedido, la víctima radicó la denuncia a los seis meses del hecho y la causa no prosperó y fue archivada al poco tiempo.
Si bien en Mar del Plata no hay confirmados casos en que se haya utilizado burundanga durante una violación, no significa que no existan abuso sexuales y que no haya que tomar medidas y recaudos al respecto, pero al menos indica que no hay que entrar en pánico si un taxista o remisero tira perfume en el auto o si alguien le pasa un celular u otro elemento a una mujer y ella lo agarra.
La importancia de denunciar al instante
Fuentes policiales consultadas por LA CAPITAL aseguraron que en Mar del Plata se registraron denuncias en la Comisaría de la Mujer de mujeres que dijeron haber sido drogadas por burundanga, aunque en ningún caso se pudo comprobar el uso de esa sustancia.
Uno de los grandes problemas de las denuncias, según las fuentes, es que las víctimas al sentirse bien no se someten a las pericias químicas que pueden determinar si fueron o no drogadas, algo fundamental en estos casos.
Desde la fuerza recomendaron a las posibles víctimas a que formalicen las denuncias por más que se sientan bien y los efectos de la supuesta droga pasen en pocos minutos. De esta manera sirve para que se inicie una investigación formal.
Además, las fuentes policiales remarcaron el peligro del “escrache” en las redes sociales, en estos casos en que no está comprobado el uso de algún tipo de droga ni la intención de abuso sexual.
“Parece que existe una psicosis al respecto de la burundanga basada en la desinformación”, expresaron las fuentes policiales consultadas.
Fuente Diario La Capital