La seguridad en las calles es un asunto serio. Es por eso que debemos tomar las medidas necesarias para resguardar nuestra integridad física y la de nuestros seres queridos. En esta nota conocerás más sobre cómo actuar en un secuestro.
¿Por qué ocurren los secuestros?
Las tácticas delictivas se hacen cada vez más sofisticadas, y el secuestro es uno de los crímenes más peligrosos en ese sentido. Como nadie desea que su libertad sea restringida por delincuentes, es necesario conocer por qué suceden.
Por lo general, los secuestradores basan su actividad en motivos económicos, ya que estudian a sus víctimas antes de ejecutar el hecho, seleccionando aquellas a las que pueden extorsionar para recibir dinero a cambio de su liberación posterior.
No obstante, los secuestros también pueden tener motivaciones políticas, pasionales, intimidatorias, entre otras.
Si una persona es sometida a una situación de secuestro, es importante que siga estas recomendaciones:
1. Conservar la calma
Las personas secuestradas estarán sometidas a momentos de alta tensión psicológica y emocional, pudiendo sufrir ataques de ansiedad, estrés o pérdida de control sobre su propia conducta. Cuando esto ocurre, los secuestradores tienden a aumentar su actitud de hostilidad hacia la víctima.
Esto puede ocasionar que la persona secuestrada sea objeto de mayores intimidaciones o agresiones físicas, llegando a poner en peligro su propia vida. Por lo tanto, se recomienda mantener una conducta calmada, evitando en todo momento confrontar al delincuente.
2. Cooperar con los secuestradores
Es importante tener en cuenta que los secuestradores también están sometidos a tensión psicológica, ya que, no solo deben mantener el control mental y físico sobre la víctima, sino también evadir a las autoridades.
Por esta razón, las personas que son objeto de un secuestro deben mostrarse lo más cooperativas que puedan ante su victimario, con la finalidad de evitar cualquier agresión mayor. Recordemos que salvaguardar la vida es una prioridad.
3. No mentir acerca de datos de interés
Existe una gran probabilidad de que los secuestradores realicen ciertas preguntas sobre temas sensibles, como, por ejemplo, cuántos miembros tiene el núcleo familiar de la víctima, claves de las tarjetas de débito o crédito, información sobre propiedades, etc.
Cuando esto sucede, lo más recomendable es decir la verdad, ya que los secuestradores pueden conocer las respuestas desde antes, y quizás su intención real sea poner a prueba la sinceridad de la víctima.
De igual manera, en caso que los secuestradores no conozcan los datos solicitados, luego que la víctima diga sus respuestas, estos pueden intentar hacer una comprobación, por ejemplo, acudiendo a un cajero automático para retirar dinero.
Entonces, si los datos indicados resultan falsos, se incrementará la hostilidad del agresor a su víctima, y esto empeorará la situación de manera grave.
4. Los familiares deben actuar con precaución
El núcleo familiar de una persona secuestrada también se convierte en una víctima emocional y psicológica del hecho. Además, la integridad de sus miembros también se pone en riesgo, ya que muy seguramente su vivienda estará fichada por los delincuentes.
Ante esto, se recomienda que los familiares se resguarden en otro lugar mientras se desarrolle el secuestro.
Igualmente, es crucial solicitar apoyo inmediato a los cuerpos policiales, ya que estos cuentan con unidades especializadas en materia de secuestros, y siempre estarán dispuestos a ayudar en todo lo que sea necesario para lograr la liberación del secuestrado.
En muchas ocasiones, los secuestradores intentarán intimidar a la familia, exigiendo no contactar a la policía, ya que, de lo contrario, se enterarán si esto ocurre. Sin embargo, la gran mayoría de veces, este argumento resulta ser falso.
5. Seguir las instrucciones policiales
La policía cuenta con funcionarios altamente entrenados en este ámbito, quienes también poseen habilidades de rastreo, comunicaciones y negociación. Por eso, es indispensable seguir todas sus indicaciones durante el secuestro.
De esta manera, existirá una mayor probabilidad de preservar la vida de la víctima, así como también la de sus familiares.