Seguridad Privada

Estudio parcial Riesgo Extorsión:

Comprendiendo La Amenaza

El fenómeno de la extorsión ha cobrado importancia en la última década debido a su aumento y capacidad de adaptación, especialmente en América Latina. Pero antes de iniciar con este documento, que nos muestra un Estudio Parcial del Riesgo de EXTORSIÓN, queremos resaltar y enaltecer la labor de esas mujeres y hombres pertenecientes a la Dirección Antisecuestro y Antiextorsión de mi amada Policía Nacional, a los Gaula Militares y en cada país a sus pares, quienes dejan en un segundo plano su seguridad y las de sus seres amados en búsqueda de acabar con este flagelo que afecta la sociedad, los países y la región. (Estudio parcial Riesgo Extorción)

La Extorsión

La extorsión se viene alimentando en los últimos años de situaciones emergentes como el cibercrimen, multi crimen, las migraciones, sobredimensión de eventos, capacidad de respuesta limitada, incremento de incertidumbre, políticas criminales obsoletas, pérdida de confianza de sectores de la sociedad, son algunos de las variables a profundizar en esa investigación del riesgo de la extorsión por parte de los gobiernos, entidades sin ánimo de lucro dedicadas a estas investigaciones y por qué no, al sector privado.

El Crimen Organizado

El crimen organizado en nuestras regiones ha demostrado gran capacidad de innovación, de adaptación a los cambios de contexto y ante las respuestas institucionales. Además, la extorsión misma les ha dado la riqueza y también poder a base del temor que los estimula para seguir expandiendo su control territorial, en un círculo vicioso que parece imposible de vencer. (Estudio parcial Riesgo Extorción)

Por ejemplo, en Colombia, que lleva décadas sufriendo de este delito, hasta el momento, no se cuenta con cifras unificadas y consolidadas, lo cual dificulta caracterizar y combatir la extorsión. Se identifica que, en los últimos años, la transformación en el accionar de los actores ilegales del conflicto colombiano, como son los grupos terroristas, grupos organizados armados al margen de la ley, grupos de organizados delincuenciales, grupos de delincuencia común organizados entre otros, traducen en un cambio en la evolución de esta práctica y su impacto sobre diferentes sectores de la sociedad. A diferencia de otros delitos, la extorsión se presenta de manera indiferenciada, históricamente no es tan evidente sus momentos y lugares más álgidos pare verlos hoy sin discriminación en los sectores urbanos, como rurales, a los empresarios como a las personas naturales. (Estudio parcial Riesgo Extorción)

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN APLICADA-AMENAZA SOCIAL: Agente generador del riesgo- EXTORSIONISTA

Existen diversas teorías que explican la actividad criminal desde lo biológico, el aprendizaje, la personalidad, lo económico, lo cultural, lo social, etc. En la publicación “Reflexiones sobre el delito de extorsión y los procesos cognoscitivos que se desarrollan en las víctimas y victimarios”, Celedón, Saleme, López y Pardo, nos indican que la teoría planteada por Ryle (citado por Beltrán y Albarán, 2007) logra integrar los tres ejes fundamentales para tenerse en cuenta al momento de una persona para delinquir. Para Ryle, la comisión de un delito requiere de la conjunción de tres factores:

  • El componente volitivo, es decir, querer delinquir;
  • El componente cognitivo, que se refiere a los conocimientos técnicos que prescriben el procedimiento necesario para la ejecución del delito; y
  • El componente de control emotivo, es decir, la capacidad para regular las emociones en los momentos álgidos de la ejecución del delito.

Este último componente busca regular al sujeto delincuente con la situación del delito, aunque a menudo el exceso de emotividad conlleva al delincuente a ser más agresivos (Ryle, 1975, citado en Beltrán & Albarán, 2007).

El Extorsionista

Por tanto, el extorsionista debe razonar más que llevarse por meros impulsos, ya que sus motivaciones provienen del análisis que se haga de la situación delictual. Por ende, para Elias (1997), si los tres componentes se regulan y se encuentran presentes en la ejecución de un delito, aumenta la probabilidad de que éste se realice el delito. De acuerdo con lo anterior, extorsionar es una tarea que requiere una minuciosa planificación, y por ello la probabilidad de éxito aumenta cuando es un grupo el que ejecuta el delito y disminuye fuertemente cuando es solamente una persona la que intenta la acción. En el grupo delincuencial organizado, cada miembro que participa en una extorsión estaría representado por el comportamiento volitivo, ya que esto garantiza el propósito común de la acción, donde la firme convicción de lo que debe hacerse permite la coordinación de labores delictivas, de tal forma que cada persona subordina sus intereses a favor del “interés común” en el grupo de extorsionistas. (Estudio parcial Riesgo Extorción)

Con respecto a la víctima, y de forma general los extorsionistas, conocen todo acerca de ella: los bienes, los movimientos económicos, familiares, entre otros. Las fuentes en que se basan los extorsionistas para obtener la información de las víctimas son variadas: fuentes primarias: contacto directo con las víctimas; fuentes secundarias: personas conocedoras de las víctimas o terceros que le suministran información a los extorsionistas; y fuentes terciarias: documentos y demás medios informacionales que le sirven a los extorsionistas para indagar sobre

la víctima seleccionada. Por lo general, la fuente secundaria es la que los extorsionistas utilizan al momento de elegir a sus víctimas. (Estudio parcial Riesgo Extorción)

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN APLICADA- RELACIÓN HUMANA RIESGOS: Factor la VICTÍMA de la Extorsión

Frecuentemente los seres humanos tenemos la creencia acerca de quiénes somos y lo que hacemos en el “auto esquema”, donde resultamos inconsistentes (es decir, se cree una cosa, aunque de hecho se presenta un comportamiento contrario), la gente experimenta un estado psicológicamente incómodo conocido como “disonancia cognitiva” (Aronson, 1969, 1992, 1999; Festinger, 1957; Gerard, 1992; Harmon-Jones y Mills, 1999, citado en Reeve, 2003). Estamos seguros, yo tengo el control, a mi no me pasa, eso es con los demás, entre otros pensamientos y acciones. Aunque cuando las personas que son objeto de algún tipo de extorsión, por ejemplo, pueden:

  • Ceder a la amenaza y esperar que los extorsionistas cumplan con lo amenazado, o llegar a creer que al no denunciar el hecho no coloca en peligro a la víctima primaria (y con ello elimina la creencia disonante);
  • Trivializar la moral a la decisión, de denunciar, y que los delincuentes cumplan con la amenaza; por ende, realiza lo que el consenso social establece como correcto, aunque todo haya terminado mal(disminuyendo así la importancia de la creencia disonante);
  • Establecer a través de las estadísticas que le aseguren que los medios utilizados por las autoridades son eficaces al momento de combatir la práctica de extorsión, por tanto, se pensó que al poner en conocimiento los hechos, minimiza el grado de responsabilidad frente a la decisión moral (añadiendo de esta forma una nueva creencia consonante, o dos);
  • Reflexionar que lo más importante es salvaguardar el bienestar de las víctimas y creer en la capacidad operativa de la justicia (con ello incrementa la importancia de la creencia consonante).

El grado de resistencia al cambio de tales creencias depende de:

  • Cuán cercanas estén a la realidad (es decir, ¿las autoridades competentes en realidad lograrán resolver el problema?);
  • Cuán importante o central son para el visón propio de “sí mismo”;
  • El grado de sufrimiento y el costo que habría que soportar (por ejemplo, ¿cuán doloroso será renunciar a no cumplir la exigencia de los extorsionistas?).

Una de las emociones que surge inmediatamente al poner en conocimiento a la víctima de la extorsión, y es utilizada como mecanismo regulador, es la ansiedad y la falta de predictibilidad ante un posible daño, lo cual se evalúa con miedo o temor como reacción secundaria. El miedo surge con la interpretación que hace el individuo de una situación como potencialmente peligrosa y amenazante. Los peligros y las amenazas percibidas pueden ser psicológicas o físicas, Por consiguiente, la percepción del hecho frena su acción al enfrentar la amenaza o el peligro ambiental (Bandura, 1983). Por tal motivo, la amenaza y el daño son los temas que unifican las emociones del miedo, tristeza, ira y repugnancia (Reeve, 2003). Para Reeve (2003), cuando se anticipan o prevén los malos acontecimientos, las personas sienten miedo. Por ejemplo, una vez que surge la amenaza en la extorsión, y probablemente vulnerada, la gente responde mediante:

  • La toma de acción para enfrentar el problema; interponer la denuncia;
  • La negación de su importancia (Evitación Psicológica); o
  • El cambio de la valoración misma (por ejemplo, “esa amenaza proviene de delincuentes comunes en vez de crimen organizado”).

En consecuencia, la función de enfrentamiento cambia la forma en que se valora una situación, y un cambio en la valoración provoca una variación en la emoción. Así, la gente primero valora sobre todo su relación con la situación (valoración primaria), y luego su potencial de enfrentamiento dentro de dicha situación (valoración secundaria). Es así como el ser humano víctima de la extorsión se ve abocado muchas veces a renunciar a sus principios y creencias por adaptarse a la situación que amenaza su integridad y lo obliga a ser discordante con ellos viéndose obligado a buscar formas de que esa discordancia se adapte a la vivencia que experimenta y reducir así el malestar psicológico que lo acompaña. (Estudio parcial Riesgo Extorción)

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN APLICADA- ESPECIALIZACIÓN DE EXPOSICIÓN A MULTIAMENAZAS: Situaciones relevantes a tener en cuenta con la EXTORSIÓN
  1. La no denuncia a las autoridades no solo representan una limitación en su caracterización, sino que adicionalmente, obstaculizan la posibilidad de enfrentar este delito de manera rápida y efectiva. La no denuncia, se podría explicar, por varios elementos.
    • Por un lado, por el miedo que se genera sobre las víctimas frente a la amenaza sobre la vida; principal gancho de la extorsión y en los últimos años con más fuerza de la micro extorsión.
    • Por otro lado, por la falta de credibilidad y confianza de los ciudadanos en las instituciones, donde, como lo argumenta Gustavo Salazar, “la no denuncia de ciertas conductas delictivas está determinada por razones que van desde la percepción del evento como algo normal o algo menor, hasta la desconfianza institucional” (Salazar, 2005: 9).
  2. La transformación en la financiación de los grupos ilegales y de la dinámica del conflicto, la seguridad ciudadana en Colombia son elementos clave para entender las dimensiones de esta práctica. Los modos de operación delincuencial influyen directamente en la movilidad, desarrollo y evolución de la extorsión. Esto se explica en gran medida por la lucha contra el narcotráfico (principal fuente de financiación de los grupos ilegales) donde muchos grupos ilegales han optado por diversificar sus fuentes de financiación y la extorsión representa un método que les permite avanzar en la apropiación de recursos (Echandía, 2006). “La extorsión se ha convertido en una táctica eficaz e indiferenciada de control social, que a los victimarios les cuesta menores esfuerzos logísticos y propagandísticos” (Gómez, 2005:2). Esto se traduce en el incremento de la micro-extorsión y la dispersión del delito. Anteriormente, se hablaba de extorsión a grandes compañías o empresarios por grandes sumas de dinero y de manera muy selectiva. Actualmente, ya no se habla de grandes montos de dinero a algunos sectores, sino que se expande a varios sectores y personas por un monto menor. Frente a esto, las autoridades señalan cómo pequeños comerciantes denuncian que son víctimas de esta nueva modalidad y que muchas veces no son conscientes del delito del que están siendo víctimas. En la medida en que la micro-extorsión se expande es cada vez más difícil identificarla, diagnosticarla y caracterizarla. (Estudio parcial Riesgo Extorción)
  3. Adicionalmente, la extorsión como delito encierra la complejidad de poder ser a un mismo tiempo víctima y cómplice. Esto implica entender que “la extorsión es, sin duda, una de esas conductas delictivas que nos ubican en un universo complejo, dado que incorpora a la víctima a un círculo delictivo, y lo hace con frecuencia, cómplice o, al menos, cómplice pasivo” (Salazar, 2005: 9). El gran dilema alrededor de las víctimas de extorsión es cómo al no denunciar por miedo a perder la vida, entran en un círculo perverso donde pueden quedar implicadas como cómplices. Muchas veces los ciudadanos al no percibirse víctimas del delito, no lo denuncian. Y bel victimario puede terminar mañana en un proceso de desmovilización reinserción, o mejor aún en negociación para rebaja de penas, denunciando a la víctima como financiador, que por lo general terminara siendo en varias ocasiones y al no tener una denuncia ¿cómo demostrar que fue baja la intimidación?
  4. La dimensión del fenómeno se complejiza al plantear los diversos riesgos de pagar extorsión que se hacenevidentes sobre todo a largo plazo. “La dimensiónactual de la extorsión no es conocida, la única certeza que existe es que el pago de extorsión posiblemente le permite a quien paga solucionar algunos problemas inmediatos, pero a futuro, existe la total certeza de que el pago se devolverá en contra de quien paga, en contra de sus cercanos y de la comunidad y en contra de un Estado democrático” (Salazar, 2005: 12). Frente a las dimensiones que se resaltan, las personas el sector empresarial, se enfrenta a un gran dilema entre su condición de víctima o de cómplice y es importante señalar, que una vez los ciudadanos colaboren en la denuncia del delito, el Estado debe garantizar su seguridad.

En conclusión, las dificultades en el subregistro de la información limitan una posible caracterización del fenómeno y sobre todo son un obstáculo para enfrentar y combatir de manera coordinada entre las autoridades y la sociedad civil este delito. (Estudio parcial Riesgo Extorción)

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN APLICADA- SABERES Y PRACTICAS DE LA GESTIÓN DEL RIESGO: ¿La víctima sabe cómo actuar ante una EXTORSIÓN?

La divulgación en la información sobre la prevención de la extorsión es permanente por parte de las autoridades, especialmente a través de las redes sociales, medios de prensa. Algunos Sistemas de adopción voluntaria como por ejemplo el Sistema de Gestión en Control y Seguridad BASC V6:2022, Operador Económico Autorizado OEA, los solicita en sus programas de capacitación, como delito que afecta la cadena de suministro, además de planes para la reacción en caso de concretarse, los sistemas de prevención de Lavado de Activos, Financiación del Terrorismo, al ser un delito fuente. La pregunta es si comprendemos el riesgo (Investigación del Riesgo), lo hemos valorado (Gestión del Riesgo) y estamos preparados ante su materialización (Plan de Continuidad del Negocio), si la comunicación es asertiva y correcta para el objetivo propuesto, se enseñó, se entendió, se aplica, se valoró y tenemos claro su eficacia. Por ahora les compartimos las recomendaciones que nos brinda El ministerio de Justicia y del Derecho en Colombia, pero es importante en cada uno de sus países revisar si esta información existe. nos recomienda:

  1. En caso de ser víctima o conocer un caso de extorsión, comuníquese con la línea telefónica 165 del Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal GAULA, el personal encargado de recibir información sobre extorsiones atenderá su caso, solicitará la información pertinente y le dará indicaciones sobre cómo proceder o realice directamente su denuncia en línea haciendo clic aquí.
  2. El GAULA se encargará de trasladar el caso a un fiscal delegado para casos de extorsión y este se encargará de ponerse en contacto con la víctima para ampliar la denuncia. Los delegados de la fiscalía y el grupo GAULA trabajarán conjuntamente para capturar al o los responsables y se encargarán de brindar seguridad a la víctima y a su familia(Estudio parcial Riesgo Extorción)
  3. Una vez capturado el o los presuntos delincuentes, la fiscalía tendrá la labor de investigar los hechos con la cooperación del grupo GAULA y llevarlos ante el juez penal, que se encargará de determinar el o los responsables del delito.
Recomendaciones a tener en cuenta:
  • Rodear a nuestras autoridades, no es culpa de los Gaula (o quien haga sus veces en su país), del incremento de los casos de extorsión, los responsables son los terroristas, los delincuentes. Ellos esperan ver a una sociedad temerosa frágil, alejada de la institucionalidad. En el momento que les mostremos que estado, empresas, sociedad actuamos como uno solo, empezaran a comprender que su judicialización o neutralización está cerca.
  • No debemos esperar a que las entidades gubernamentales nos convoquen para colaborar en la campaña antiextorsión. Especialmente los gremios, las entidades sin ánimo de lucro, las instituciones educativas, las juntas de acción comunal, las asambleas en propiedad horizontal, entre otros, donde la campaña debe estar dirigida principalmente en la necesidad para la ciudadanía se proteja, anticipe y dado caso a que denuncie, mostrar la forma en como el estado es capaz de proteger y garantizar la seguridad de las personas. En este sentido, el sector empresarial en alianza con el gobierno debe unirse a esta campaña y sensibilizar a padres, madres, hijos, empleados, contratistas y proveedores frente a la importancia de la prevención y denuncia de esta práctica.
  • Diseñar, revisar, ajustar, enseñar, aplicar protocolos, procedimientos, planes de Seguridad establecidos para enfrentar este riesgo/delito, Las acciones al interior de las organizaciones que se deben tener en cuenta para enfrentar la extorsión están orientados a fortalecer mecanismos de denuncia y confianza al interior de la empresa para posteriormente articular la información con las autoridades correspondientes. Al interior de las empresas se deben garantizar mecanismos de denuncia seguros y eficientes donde sea posible denunciar el delito de manera oportuna y garantizando la seguridad de la víctima. Estrategia de trabajo con contratistas y proveedores de la empresa
  • Realizar Estudios de Riesgo en áreas consideradas de alta exposición como parte del esfuerzo por caracterizar el fenómeno de extorsión en la zona de operación: Comprender el cómo, cuando, en donde, el quién y el porqué del entorno donde estoy puede llevarnos a la probabilidad de la materialización, es fundamental tener conocimiento de su comportamiento y evolución, es una tarea clave que se debe fortalecer previamente.

Fuente: Carlos Alfonso Boshell Norman