Prestar atención es algo fundamental en nuestra vida cotidiana, siempre hay forma de mejorar nuestro rendimiento, ampliar nuestros conocimientos y por lo tanto mejorar nuestro comportamiento, por lo que es interesante aprender y entender cómo funciona nuestra atención para saber dirigir nuestro radar, nuestro foco de atención. Esto, nos ayudará en nuestra toma de decisiones.
Si mejoras tu forma de dirigir y enfocar la atención tu rendimiento, en muchos de los aspectos fundamentales de tu vida, mejorará de forma casi inmediata. Y esto, ¿a qué se debe?
Primero es interesante comprender que se entiende por atención, según Soledad Ballesteros (doctora en Psicología por la Universidad Complutense de Madrid) “La atención es el proceso por el que dirigimos nuestros recursos mentales sobre algunos aspectos del medio, o bien sobre la ejecución de ciertas acciones que consideramos las más adecuadas posibles. Hace referencia al estado de observación y de alerta que nos permite tomar conciencia de lo que ocurre a nuestro alrededor”. Pero ¿Cómo percibimos las cosas?
Como seguramente sepas, percibimos los estímulos a través de los sentidos. De manera natural, nuestros sentidos perciben en todo momento funcionando como un radar. Pero lo realmente importante es que podemos hacerlo de manera activa, si algo nos llama la atención lo percibiremos selectivamente. Por ejemplo, tus ojos no son una simple ventana por la que ves el entorno, más bien, tus ojos exploran lo que te rodea guiados por el cerebro haciendo que los estímulos que buscas sean mucho más fáciles de percibir.
El Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) ha descubierto que, cuando se presta mucha atención a un estímulo, las neuronas se activan al unísono, aunque estén en diferentes partes del cerebro, para que se pueda poner toda la atención a la actividad que la necesite en ese momento y conseguir cumplir el objetivo.
Claro está que prestar atención intencionada todo el día, es algo muy complicado, de hecho, el periodo de concentración máxima solo dura en torno a catorce minutos. Pero lo que si puedes escoger es a que prestarle atención. Además es fundamental, cuidarse bien para poder tener un rendimiento óptimo. En cuidarse bien se incluye: una alimentación responsable, unas horas de sueño razonables, así es como conseguirás tener una capacidad de atención más fuerte y desarrollada que si no lo hacemos.
Otro buen consejo que puedes seguir, para mantener la atención en la tarea que tienes entre manos, es no confiar en el Multitasking, puesto que no funciona, no estás haciendo dos tareas a la vez, estas dividiendo tu atención en las dos tareas, y, lo más probable es que acabes haciéndolas sin la calidad que esperas, porque no prestaste suficiente atención y no pudiste percibir toda la información necesaria.
En definitiva, prestar atención a algo no es un devenir del destino, es algo que tu escoges hacer, dirigiendo tus sentidos. Para poder prestar una atención más duradera es bueno cuidarte, durmiendo una buena cantidad de horas y teniendo una alimentación saludable, con todo ello lograrás emplear tu atención de manera eficaz obteniendo mejores resultados en tu vida profesional y laboral.
Fuente: Martín Brainon
