Ambos países tendrán que afrontar situaciones complejas si las relaciones binacionales continúan deteriorándose por culpa de no tener un programa de intercambio de información tributaria.
Pese al ultimátum que el Gobierno Panameño le dio a Colombia después de que el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas decidiera incluir al vecino país dentro de la lista de paraísos fiscales, la posición sobre dicho señalamiento se sostuvo insistiendo en tener una mesa de concertación con las autoridades extranjeras.
Así lo concluyó el Gobierno tras una rueda de prensa ofrecida por la Ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, María Ángela Holguín y el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, quienes viajarán al vecino país a reunirse con sus homólogos panameños para evaluar condiciones de conciliación.
Sin embargo, analistas consultados por Dinero consideran que de mantener un ambiente de discordia y posibles sanciones contra el sector real de la economía de ambos países, podrían darse las siguientes consecuencias que tendrían que asumir ambas naciones.
– Habrían impactos patrimoniales en las negociaciones a nivel macro y país de las empresas nacionales establecidas en suelo panameño.
– Todos los giros que se hagan a Panamá tendrían una rete-fuente de 33% o de lo contrario no serán considerados como costo de deducción.
– Tendrán que ajustarse los precios de transferencia que son aquellos a los cuales una parte relacionada realiza una transacción (compra y venta de bienes o servicios) a otra parte relacionada. Que en el caso de los empresarios deberán demostrarse que realmente son los que presentan en los balances.
– Se reduce la posibilidad de que la petición del sector real colombiano al Gobierno de establecer un Tratado de Libre Comercio con Panamá para reducir los fenómenos anteriormente expuestos, puesto que sin intercambio de información tributaria, la propuesta ni siquiera se contemplará.
– Aumentarían los costos de las operaciones comerciales basadas en el traslado de mercancía vía marítima, lo que retrasaría y hasta impediría por los altos costos el normal flujo del comercio.
– Afectación a la distribución de mercancía pues la Zona Libre de Colón es un punto de distribución estratégico para la distribución de mercancía en todo el mundo, pues las mercancías provenientes de Asia a América deben pasar por el Canal de Panamá.
– Aquellos capitales que salieron del país para hacer empresa y Panamá y regresar constituidos a operar en Colombia, tendrán que revelar su verdadera naturaleza y tributar adecuadamente a una tarifa baja o alta según procedan.
– Se abre la puerta a nuevas regulaciones que beneficiarían a la economía colombiana que se ve afectada por otros fenómenos como la subfacturación y el contrabando provenientes del vecino país, eventos que aun a la vista de todos, pasan desapercibidos por la regulación comercial.
Fuente: El Dinero.
